Fue precedida por las alquimistas anteriores al siglo XVII, entre ellas Hipatia de Alejandría (c. 355/370- c. 415) y Marie le Jars de Gournay (1565-1645). Fueron sus contemporáneas Margaret Cavendish (1623-1673), la filósofa inglesa Anne Finch Conway (1631-1679). Katherine Boyle, Lady Ranelagh (1615-1681) y la escritora francesa Marie de Maupeou Fouquet, vizcondesa de Vaux (1590-1681) y la naturalista francesa Maria Sybilla Merian (1647-1717).
Otras importantes científicas, herederas de esta época, son la física y matemática napolitana Maria Angela Ardinghelli (1728-1825) , Laura Bassi (1711-1778) que trabajó con la electricidad y potenció la constitución de una red de experimentadores que conectó Italia con la cultura científica de Francia e Inglaterra; también, Lucia Galvani (1737-1798) que realizó importantes estudios sobre la electricidad; Clelia Grillo Borromeo (1684-1777) aficionada a las ciencias naturales y a las matemáticas, organizadora de un salón de reuniones científicas en su palacio de Milán; la profesora de anatomía Anna Morandi Manzolini (1716-1774); la matemática Gaetana Agnesi (1718-1799) que trabajó en el cálculo diferencial en Milán. Por otro lado, la química escocesa Elizabeth Fulhame, escribió el ensayo An Essay on Combustion en 1794, y Marie Aimée Lullin (1751-1831) entomóloga suiza realizó importantes estudios sobre las abejas. En Francia Émilie du Châtelet (1706-1749) tradujo la obra de Isaac Newton al francés.
Otras importantes científicas, herederas de esta época, son la química Marie-Anne Pierrete Paulze (1758-1836), la divulgadora científica Jane Marcet (1769-1858), la matemática y científica Mary Fairfax Somerville (1780-1872), mentora de Ada Byron-Lovelace (1815-1852) o la astrónoma Caroline Herschel (1750-1848) entre otras.