Activitat

Las mujeres en la comuna de París

Personatges:

Louise Michel

Tema: Historia contemporánea. Derechos humanos.

Competències

Competència en Comunicació Lingüística

Competència personal, social i aprendre a aprendre

Competència Ciutadana

Competència en consciència i expressions culturals

Matèries i cursos per Sistema Educatiu

Espanya > Geografia i Història > 3r ESO > Societats i territoris. Geografia. Història. Història de l'art

Espanya > Geografia i Història > 4t ESO > Societats i territoris. Geografia. Història. Història de l'art

Enunciat

<img title="Women's Legacy logo" src="//inclusion.womenslegacyproject.eu/images/LogoWL.svg" /><hr />Lee el siguiente fragmento de la obra de Louise Michel La comuna de Par&iacute;s. Historia y recuerdos, publicado en 1898 y responde a las preguntas.
5. Primeros d&iacute;as de La Comuna &ndash; Las medidas &ndash; La vida en Par&iacute;s Tiempos futuros, visi&oacute;n sublime &iexcl;Los pueblos est&aacute;n fuera del abismo! El triste desierto se ha atravesado; Tras las arenas el c&eacute;sped, Y la tierra es como una esposa, Y el hombre es como un novio.
V&iacute;ctor Hugo
&iexcl;Par&iacute;s respiraba! Aquellos que durante la marea alta vieran llegar las olas que cubrir&iacute;an su refugio, estar&iacute;an en una situaci&oacute;n semejante. Lenta, inexorablemente, Versalles llegaba.
Los primeros decretos de la Comuna hab&iacute;an sido la supresi&oacute;n de la venta de los objetos del Monte de Piedad, la abolici&oacute;n del presupuesto para cultos y reclutamiento. Se cre&iacute;a entonces, quiz&aacute; todav&iacute;a, que la funesta relaci&oacute;n entre Iglesia y Estado, que tantos cad&aacute;veres arrastran tras ellos, podr&iacute;a ser alguna vez rota. &Uacute;nicamente juntos es como tienen que desaparecer.
La confiscaci&oacute;n de los bienes de mains morts. Pensiones alimenticias para los federados heridos en combate, para la mujer, leg&iacute;tima o ilegitima, al hijo, reconocido o no, de todo federado muerto en combate.
Versalles se encarg&oacute; con la muerte, de esas pensiones.
La mujer, que ped&iacute;a la separaci&oacute;n de su marido apoyada en pruebas v&aacute;lidas, ten&iacute;a derecho a una pensi&oacute;n alimenticia.
El procedimiento ordinario quedaba abolido, y se autorizaba a ambas partes a defenderse por s&iacute; mismas.
Prohibici&oacute;n de registro sin mandato regular.
Prohibici&oacute;n de acumulaci&oacute;n, y el sueldo m&aacute;ximo fijado en seis mil francos al a&ntilde;o. Las retribuciones de los miembros de la Comuna eran de quince francos diarios, lo cual estaba lejos de alcanzar el m&aacute;ximo.
La Comuna decidi&oacute; la organizaci&oacute;n de una sala del tribunal civil de Par&iacute;s.
La elecci&oacute;n de los magistrados, la organizaci&oacute;n del jurado y el juicio por sus pares.
Se procedi&oacute; inmediatamente a entregar a las sociedades laborales los talleres abandonados.
El sueldo de los maestros se fij&oacute; en dos mil francos.
Se decidi&oacute; el derribo de la columna Vend&oacute;me, s&iacute;mbolo de fuerza brutal, afirmaci&oacute;n del despotismo imperial, porque este monumento atentaba contra la fraternidad de los pueblos.
M&aacute;s tarde, con el fin de poner t&eacute;rmino a las ejecuciones de prisioneros hechos por Versalles, se a&ntilde;adi&oacute; el decreto para los rehenes apresados entre sus partidarios (fue, en efecto, la &uacute;nica medida que disminuy&oacute; las matanzas de prisioneros; se adopt&oacute; tard&iacute;amente, cuando fue imposible, sin traici&oacute;n, dejar que no se degollara a los federados prisioneros). La Comuna prohibi&oacute; las multas en los talleres, aboli&oacute; el juramento pol&iacute;tico y profesional, e hizo un llamamiento a los sabios, a los inventores, a los artistas. Segu&iacute;a pasando el tiempo y Versalles no estaba ya en el punto en que la caballer&iacute;a no ten&iacute;a m&aacute;s que sombras de caballos. Thiers mimaba, lisonjeaba al Ej&eacute;rcito que necesitaba para sus magnas y sucias operaciones.
Los objetos depositados por menos de veinticinco francos en el Monte de Piedad fueron devueltos a sus due&ntilde;os.
Se quiso abolir, por ser demasiado penoso, el trabajo nocturno en las tahonas; pero ya por antiguos h&aacute;bitos o porque realmente fuese a&uacute;n m&aacute;s dif&iacute;cil de d&iacute;a, los panaderos prefirieron seguir como siempre.
Hab&iacute;a por doquier una vida intensa. Courbet, en un caluroso llamamiento, dec&iacute;a: &ldquo;Entreg&aacute;ndose cada uno sin trabas a su talento, Par&iacute;s duplicar&aacute; su importancia. Y la internacional ciudad europea podr&aacute; ofrecer a las artes, a la industria, al comercio, a las transacciones de todo tipo, a los visitantes de todos los pa&iacute;ses, un orden imperecedero, el orden asegurado por los ciudadanos, que no podr&aacute; ser interrumpido por los pretextos de monstruosos pretendientes&rdquo;.
&nbsp;
1) Sit&uacute;a en contexto hist&oacute;rico los hechos de los que habla el texto.
2) Tomando como punto de partida el texto, explica qu&eacute; medidas adopt&oacute; el gobierno de la Comuna de Par&iacute;s.
3) &iquest;Qu&eacute; papel desempe&ntilde;&oacute; Louise Michell durante el gobierno de &laquo;La Comuna&raquo;?

Observacions i context

- A partir de la figura de Louise Michelle podemos hablar del papel de la mujer tanto en la revolución industrial como en el movimiento obrero, es decir, la participación de las mujeres en las revoluciones del XIX. La participación de las mujeres se ocupó de sus condiciones laborales y de las de las niñas y niños.

Entre las mujeres que tuvieron un papel destacado en el movimiento obrero del siglo XIX cabe destacar a Flora Tristán y, en España, Teresa Claramunt o las Cigarreras.

Descripció

Lectura de un fragmento de la obra La Commune, donde la autora narra los hechos ocurridos durante esta revolución social en el París de 1871, de los cuales fue partícipe. El objetivo es tomar como punto de partida su testimonio para analizar este movimiento.

Resposta

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